Camilla Fabri, esposa de Alex Saab, reiteró que su secuestro responde a una persecución política por parte de Estados Unidos (EE.UU.), que ella misma ha vivido “en carne y hueso”.
“Hay cualquier cantidad de elementos que han sido utilizados para intentar desacreditar y disminuir la defensa de Venezuela” en torno al caso de Alex, comentó Camilla en un conversatorio con delegados internacionales de la Cumbre contra el Fascismo que se desarrolló en la ciudad de Caracas.
Camilla Fabri enfatizó que a EE.UU. “no le importa” el país de origen de Alex, o si el nombramiento como diplomático cumple con la legislación venezolana e internacional, como de hecho así lo hace, porque esa nación solo está interesada en “crear bulos de desinformación” difundidos por los “medios que se valen de “cualquier fábula” para desmeritar al Gobierno Bolivariano.
También hizo referencia a los fake news que “han repetido mentiras que la gente asume como verdad, los cuales vemos en sus más feroces ataques en guerra, pero que siempre han estado ocurriendo con el caso venezolano”.
Explicó que EE.UU. busca “deslegitimar al presidente Nicolás Maduro y al Gobierno bolivariano”, por lo que el Departamento de Justicia del país norteamericano trata de poner en discusión la autenticidad del nombramiento de Saab, a pesar de que existen los documentos oficiales probatorios que le otorgan el estatus diplomático.
“Esta revisión de EE.UU. a las credenciales venezolanas es una violación más al derecho internacional”, zanjó Camilla.
Bajo esa premisa, el secuestro de Alex Saab “es una agresión añadida a otro grupo de terribles violaciones de derechos humanos, producto de las medidas coercitivas unilaterales e ilegales”.
Vulneración de Alex y la familia Saab
Camilla Fabri alertó que la familia Saab teme por la vida del diplomático, porque desde su secuestro no ha recibido atención médica. Además, Alex recibió torturas físicas y psicológicas por parte de funcionarios policiales de Cabo Verde, donde permaneció retenido ilegalmente desde el 12 de junio de 2020 hasta su traslado a EE.UU. en octubre de 2021.
“Tememos también porque EE.UU. nos amenaza. Somos perseguidos, cuestionados, señalados moral, mediática y psicológicamente cada uno de los miembros de nuestra familia. Somos víctimas de un Lawfare que sigue dejando heridas profundas y que son una injusticia tremenda”, denunció.
Un llamado a la solidaridad
Camilla Fabri pidió a los delegados internacionales de la Cumbre contra el Fascismo que “se sumen a la lucha contra la mentira, la desunión, el fascismo, la desinformación, las sanciones y las intervenciones; porque todo esto es injusto”.
Finalmente, recalcó que Venezuela es un país fantástico al que ama y en donde vive toda su familia. “Les pido por favor que expongan en cada rincón la verdad de Venezuela y la verdad de Alex Saab”, cerró.